sábado, 6 de junio de 2009

Protectores (de pantalla)


Su protector de pantalla era la foto de un perro con las orejas bien alzadas.
Había sido su única mascota desde que se caso y se lo habían arrebatado para
botarlo en algún rancho cercano hacía ya más de 4 años. Patético. Aún lo extraña y
odia pensar que es el único ser viviente que le tuvo estima. Está deprimido,
decide cambiar al perro por una mujer con pose sugerente que viste un diminuto y vulgar bikini.Lo excita su piel enaceitada. Nunca ha cogido algo semejante. Nunca lo hará, piensa en su mujer,ella ni siquiera duerme en la misma cama desde hace años, mucho menos recuerda su último revolcón. ¿Cuándo fue la ultima vez que vi un coño? El nuevo protector de pantalla no ayuda mucho, no sabe qué prefiere, la imagen de una mujer que le ayude a fantasear un poco con vaginas o el recuerdo de lo que le parecía que era la fidelidad. Tal vez se compre otra mascota porque no espera que su esposa regrese pronto a la cama.

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